La Muerte Súbita en Deportistas

 

 

Practicar un deporte es muy saludable, recomendable y necesario para la prevención de enfermedades . Pero es importante  ser conscientes y tener cuidado, para evitar hacer ejercicio por arriba de nuestros límites fisiológicos.

 

En concreto vamos a hacer referencia a la llamada “muerte súbita”, que es el resultado de una falla cardiaca durante la práctica de la actividad física y que  nos produce la muerte.

 

Se trata de un evento generado por un un trastorno del ritmo del corazón, donde aumentan de manera importante los latidos x minuto, se vuelve irregular el funcionamiento del corazón  y esto hace que pierda la capacidad de contraerse de forma organizada para bombear sangre, y termina con la muerte.

 

Aunque las noticias de casos de muerte súbita que más nos enteramos en los medios de comunicación son relacionadas con deportistas profesionales, la realidad es que se da también en deportistas recreativos.  Ya ha pasado en México que tanto en maratones como en carreras de 10 km, por mencionar algunos ejemplos, se han dado fallecimientos durante el recorrido o inmediatamente después de cruzar la meta.

 

Según estudios y reportes médicos, indican que estos fallos cardiacos en deportistas cuando son menores de 35 años, son causadas por malformaciones congénitas del corazón, que podrían ser detectadas con pruebas médicas preventivas.

 

En el caso de los mayores de 35 años, un alto porcentaje de las muertes súbitas son producidas por lesiones en las arterias coronarias,  causadas por factores como el consumo de tabaco o por un nivel alto de colesterol.

 

Si practicamos algún deporte o realizamos actividad física, como un primer paso para evitar el riesgo de una muerte súbita,  es fundamental  anticiparnos haciéndonos 3 tipos de pruebas médicas básicas:

 

1) Evaluación de antecedentes personales y familiares en temas cardiacos

2) Un electrocardiograma

3) Una ecocardiografía

 

Foto del elmundo.es
Foto del elmundo.es

 

Consulta a tu médico para que te oriente en estas pruebas.

 

De igual manera antes de empezar un régimen de actividad física, debes acercarte a un médico para hacer una prueba de esfuerzo y conocer el verdadero estado de salud que tienes.

 

Además de estos estudios considera cuidar tus  hábitos,  como la hidratación, una buena nutrición que incluya  vitaminas, minerales, sales, proteínas, carbohidratos, grasas y ácidos grasos esenciales que nos dan los nutrientes para que el cuerpo tenga todo lo necesario para funcionar.

 

Hagamos estudios para detectar riesgos, mantengamos buenos hábitos alimenticios y no excedamos nuestros límites!

 

 

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